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En septiembre de 2016 había entrado Arco en la perrera de Jerez, y enseguida nos hicimos cargo de él. Tras pasar una primera revisión veterinaria, le diagnosticaron luxación de codo en la pata delantera, y fractura de huesos con luxación en la pata trasera. El problema es que estas lesiones tenían una antigüedad de unas 5 semanas, por lo que ya se había empezado a formar fibrosis y callo. Con todo ello se decidió dejar que la fractura siguiese su consolidación, y operar la luxación de codo, para intentar que recuperase completamente su funcionalidad.
Con dos cirugías sobre la articulación, se consiguió la perfecta recolocación.
Pero el problema más grave era su recuperación psicológica. Arco había sufrido lo inimaginable, y mostraba indefensión aprendida: incapaz de reaccionar ante cualquier estímulo, bloqueado por el miedo sin capacidad de reacción.
Lleva recuperándose en su casa de acogida 7 meses. Durante este tiempo ha avanzado mucho, pero ha llegado un punto en el que, por distintas circunstancias, es difícil que mejore más. Necesita un entorno tranquilo, no urbano. Sin niños. Alguien que tenga suficiente paciencia para que coja confianza, dispuesto a seguir pautas. Y en el caso de que haya un perro en la casa, que sea equilibrado.
Si estás interesado en adoptar a Arco, escríbenos!
Para más información, consulta nuestra web sosgolden.org (protectora de animales)